De adelante para atrás...
Hoy concluí uno de los pendientes que más estrés me estaban causando... Aún quedan dos muy importantes y es posible que por ello los vuelos sigan escaseando.
Semana Santa fue en familia, fue genial y quiero que se repita. La prima mayor y su esposo son una familia y unos anfitriones insuperables. Las tías aguantaron el paso por Cholula, Puebla, Atlixco, en todo recorrido, a toda hora, en toda actividad. La espiritualidad se hizo presente y no fue necesariamente en los templos, fue entre nosotros y eso lo hizo más especial, más humano... Nos hizo más felices.
A partir de este año, cada 21 de marzo celebro mucho más que la primavera, mucho más que el nacimiento de un ilustre mexicano. Algo nuevo nació ese día para mí, o quizás dejamos que algo que venía gestándose tuviera un nombre y se convirtiera en compromiso. Todas las cábalas, las religiosas, las numerológicas y hasta las científicas anuncian maravillas para este suceso.
Guadalajara estuvo genial con mis estudiantes de Ciencias de la Educación, hubo oportunidad para todo: diversión, cultura, convivencia, formación... Pudimos aprovechar el 95% de dichas oportunidades, nada mal para un grupo de 13 personas.