[...] el dichoso Twitter se roba, como en operación hormiga, los fragmentos que quizás compondrían una entrada relativamente decente en este blog y que se quedan como trinos efímeros...
Y efectivamente, así ha sido, confieso que la dinámica de Twitter me ha atrapado por varias razones:
- Interacción con la comunidad que lo conforma.
- Frescura de la información que ahí se discute.
- Entrañable limitación de 140 caracteres que nos reta a decir mucho en pocas palabras.
- Probabilidad elevada de que un debate entre dos personas sea seguido por cientos más, aunque lo hagan silenciosamente.
- Gran cantidad de aplicaciones como Yoono, sin ser demasiado intrusivas, permiten echar un vistazo a lo que ahí se publica y participar de inmediato.