Alguna energía especial debe traer consigo la luna llena de enero como para que los nativos americanos le nombraran la "luna del lobo", debido a que percibían un incremento en los aullidos en esta temporada.
En 2020, además, hubo eclipse de luna el 11 de enero y en esa fecha exactamente mi familia por elección y yo vivimos la noche más maravillosa de nuestras vidas...
Retomando aquello de que "hasta lo mismo es diferente", hoy releo con otros significados "La culpa de la luna", que escribí hace 11 años (un 5 de octubre, misma fecha en la que 11 años después estaba iniciando nuestro "Tener"): http://a-volar.blogspot.com/2009/10/la-culpa-de-la-luna.html
El universo no se equivoca.